¿Te atreverías a jugar al fútbol con un compañero al que le huelen tanto los pies que todos huyen de su lado cuando al darle una patada al balón se le sale la zapatilla? ¿Dejarías que se lo comiesen unas ratas mutantes, zombis y gigantes que han acudido porque detectaron el olor desde su lejano planeta y pensaron que era un gran queso?
¿Conoces la historia de los tres cerdacos? Sí, has leído bien, de los tres cerdacos, no de los tres cerditos, que esa es una historia tonta para niños pequeños. Y es que los tres cerdacos tenían cuatro enemigos terribles (no, no eran cuatro lobos): el jabón, la ducha, la colonia y el cepillo de dientes.
¿Sabéis quién fue la primera niña en atreverse a besar al niño boñiga? Pero no creáis que lo hizo por amor, no. Lo hizo porque ella y su madre habían ideado un plan para robarle al niño boñiga… bueno, ya no te puedo contar más, porque entonces te enteras del final.
Pues bien, estas son solo tres de las historias que podrás encontrar en el libro Crónicas apestosas. Hay otras, tan apestosas como estas… o aún más. Pero si estás interesado ya te encargas tú de conseguir el libro en la biblioteca o en tu librería preferida.
Eso sí, te aviso; es un libro que a tus padres les puede resultar asqueroso y quizás no te lo dejen llevar a casa. Pídeles permiso antes y ponles sobre aviso de lo que se pueden encontrar: crónicas apestosas.
Crónicas apestosas es un libro de 141 páginas, está escrito por Martín Piñol, tiene unas apestosas ilustraciones de Lluís Farré y es de la editorial Montena. Por cierto, aconsejan leerlo con mascarilla, yo ya te he avisado.
Es gracioso.
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